Los insectos son parte del ecosistema que habita nuestro jardín, pero estos deben ser controlados y evitados,ya que no todos representan un beneficio para las plantas ni para la salud; pueden ser perjudiciales para todos los miembros de la familia, además si se tiene animales en casa estos también pueden verse afectados.
La fumigación es un método de exterminio que permite el mantenimiento del jardín, controlar las plagas y prevenir enfermedades para lograr que estos espacios sanos de total esparcimiento.

Prevenir vale más que lamentar
Tener en cuenta que es importante para evitar enfermedades dentro de su círculo familiar, los ecosistemas como los jardines deben ser controlados.
No siempre tienen el equilibrio perfecto entre especies, que es que los insectos beneficiosos eviten la proliferación de insectos que traen consigo gérmenes y enfermedades, si esto no ocurre existe la posibilidad que estas se salgan de control.
Dos veces al año para su tranquilidad
La fumigación debe ser considerada como una medida de prevención antes de que aparezcan las plagas de animales o de insectos, es recomendable hacerla 2 veces al año si se tiene cambio de estaciones; por ejemplo, en primavera y verano, ya que estás estas estaciones tienen temperaturas que ayudan a la reproducción de los animales e insectos de manera más rápida con respecto a las otras estaciones.
En cambio, si el clima que se tiene en el jardín no está sujeto a cambios de temperatura extremos la prevención y el cuidado deben ser mayores. Por lo menos 2 veces al año debe hacerse una fumigación completa del espacio, y la prevención debe ser constante con productos que mejoren la calidad del ambiente sin afectar el jardín.
No solo tenemos insectos en nuestro jardín, también otros animales
Los insectos no solo son parte de nuestro jardín, sino también otros animales. La razón más importante de fumigar consiste en la desinsectación de cucarachas y la desratización. Aunque no las observamos a simple vista, pasan por nuestros hogares con más frecuencia de lo que creemos.

La plaga debe ser eliminada de Raíz
Existen plaguicidas e insecticidas que ayudan a mantener los ambientes sanos, pero no todos son efectivos con todos los animales e insectos que estén en el lugar.
Cabe destacar que pueden ser en líquidos o polvo, pero se deben de utilizar de la mano de un profesional ya que pueden acarrear otros accidentes que pueden ser peligrosos, como alergias o quemaduras si estos son muy fuertes.
La fumigación debe cubrir las necesidades de tu jardín
Depende de cada ambiente y de cada hogar, ya que si se tienen niños pequeños en casa la fumigación puede afectarlos, aunque este no quiere decir que se deba dejar de fumigar, ya que es más peligroso continuar con la plaga que se tiene en el hogar, que mantiene las enfermedades. Se deben preguntar a los encargados de la fumigación qué medidas tomar al respecto cuál es el plan que más se adapte a tus necesidades,
Es recomendable que una semana después de la fumigación se haga una limpieza del jardín para eliminar desperdicios y así mantener la higiene y orden del espacio, igual que mensualmente se debe revisar y organizar los espacios dentro del jardín, desmalezar para preservar un ambiente limpio dentro del hogar.