Quienes son amantes de la jardinería saben bien que no basta solo con regar diariamente las plantas que componen el jardín para que este se mantenga en buen estado, es necesario conocer bien cuáles son las necesidades de cada planta que poseemos para su mantenimiento estable.
Si tu deseo es introducirte en el mundo del cuidado de las plantas o ya sabes cómo cuidarlas, entonces deberías optar por tener un jardín sostenible. Pues actualmente es una de las opciones más beneficiosas.

¿Qué es un jardín sostenible?
Primero debemos comprender que lasostenibilidad es un término que se refiere al mantenimiento de las condiciones ambientales mientras se gesta el desarrollo social y económico, es decir, todos los recursos que nos da la naturaleza no son renovables y es ideal preservar lo que nos ofrece y darle un uso adecuado, para que las generaciones futuras puedan disfrutar también de ella y para que exista un debido equilibrio.
Comprendiendo esto, podemos decir que un jardín sostenible o sustentable, es aquel en el que se respetan los ciclos y biodiversidad de cada localidad, aquellos en los que se hace un uso responsable de los recursos con el objetivo de disminuir o generar un menor impacto en el ambiente. Por ejemplo, en un jardín sostenible no se usan pesticidas y tampoco se introducen especies invasivas.
Fue una idea planeada para espacios grandes, como las plazas públicas por las que transitamos y hay vegetación, pues la cantidad de especies que hay en estos lugares es mayor y por tanto el uso de los recursos dañinos también. Sin embargo, no es una práctica limitativa, porque todo el que desee puede llevarla a cabo a menor escala en su domicilio y contribuir en el equilibrio social, económico y ambiental.
Claramente esta práctica es muy buena para el ambiente, pero ¿qué beneficio tendría esto para ti? Es simple, te podrás ahorrar el mantenimiento consecutivo, es decir podrás ahorrar dinero y recursos como el agua, ya que no tendrás la necesidad de cambiar plantas o regarlas de forma muy periódica, si deseas ausentarte por períodos largos lo podrás hacer y tus plantas estarán en buen estado y lo más importante: ¡podrás vivir más y mejor dentro del planeta!
Consejos para tener un jardín sostenible

- Decide bien cuáles son las plantas que deseas tener dentro de tu jardín, investiga por tu cuenta o solicita información a una persona que trabaje en un vivero.
- Intenta escoger plantas que requieran poca agua, lo ideal sería seleccionar plantas autóctonas, de tu región geográfica, para que se adapten con facilidad a tu clima y por tanto no tengas que invertir tanto tiempo y dinero en su mantenimiento.
- Podrías dividir las plantas que escojas en tres grupos o zonas de acuerdo con su consumo de agua en: bajo consumo, medio y alto consumo. También podrías agruparlas por sus necesidades lumínicas.
- Alimenta el suelo donde estarán tus plantas, en lugar de la planta. Esto lo puedes lograr haciendo tu propio abono a partir de los residuos de materia orgánica que queden en tu hogar. Al descomponerse esta materia posee microorganismos que se alimentan de ella y servirán como fuente de energía para tus plantas. Un suelo nutrido de forma correcta permitirá que tus plantas crezcan sanamente.
- Crea un mantillo, es decir, una capa extra de materia orgánica sobre el suelo de las plantas para protegerlo del sol, evitar la evaporación del agua, el crecimiento de malezas, conservar la humedad, entre otros beneficios.
- Introduce tus plantas dentro de botellas de plástico u otro tipo de envase plástico que tengas en casa y ábrele agujeros para que puedan oxigenarse. El reciclaje contribuye a tener un jardín sostenible.